Hércules Armamento ha conseguido la concesión de la Fábrica de Armas que prevé dar empleo en un año a unas 155 personas y conseguir entre 12 y 20 millones de euros de beneficios.
De momento, los responsables de la fábrica tienen que realizar algunos trámites burocráticos para reunir cinco certificados ISO, necesarios para la producción de armamento. Se necesitarán entre cinco o seis para reunir esos certificados. En este tiempo, una veintena de personas trabajará en la fábrica de Pedralonga, la antigua Santa Bárbara, para poner a punto la planta.
Una vez finalizados los trámites, Hércules Armamento prevé una rápida expansión de la fábrica que reorganizarán para ahorrar costes y mejorar la productividad. En el primer año la empresa prevé contratar a 155 trabajadores y a otros 200 en el segundo año, puesto que hay ya 8 preacuerdos y contratos documentados. Otros seis contratos, según los responsables, están en negociación.
Los responsables de Hércules de Armamento han asegurado que no se dará preferencia a nadie a la hora de optar a los puestos de trabajo y que se buscará la cualificación y el talento. Sin embargo, hay puestos que serán ocupados por entre 30 y 45 de los 61 despedidos de las antiguas instalaciones.
El personal de la planta recibirá una formación especializada en una escuela que comenzará a funcionar el año próximo. El objetivo es convertir la Fábrica de Armas en un referente de la investigación tecnológica en Galicia en un corto espacio de tiempo.