El objetivo de estos Planes es incrementar la empleabilidad del colectivo de parados que encuentran mayores dificultades de acceso al mercado laboral como son los jóvenes menores de 30 años y los mayores de 45 años parados de larga duración, por lo que estas actuaciones contemplan un compromiso de inserción del cincuenta por ciento de los participantes.
Cada Plan, en el que se atenderá a cien personas, contempla dos campos de intervención, el primero es el trabajo con los desempleados y el segundo con el tejido empresarial. Por un lado, se trazan los itinerarios individualizados para cada uno de los participantes en función de sus capacidades y habilidades personales y de sus específicas necesidades formativas. Bajo esta premisa, el itinerario abarca acciones de información, orientación y asesoramietno, técnicas para la búsqueda de empleo y el fortalecimiento de las habilidades sociales, así como la información y motivación para el autoempleo.
El equipo de técnicos de orientación laboral actúa como mediador entre las empresas y los candidatos, seleccionando a la persona óptima para cada oferta de trabajo, según el perfil demandado por el empresariado.
La intervención en el sector empresarial incluye la promoción del programa a través de visitas a las empresas, la búsqueda de ofertas de empleo, la elaboración de perfiles profesionales de los puestos vacantes, y un seguimiento del puesto de trabajo cubierto para poder solucionar las dificultades que pudieran surgir. Además, se presta asesoramiento sobre el tipo de contrato más adecuado o ventajoso para la empresa, así como sobre las distintas ayudas y subvenciones.
Estos Planes Integrales de Empleo se configuran como uno de los instrumentos más eficaces dentro de las políticas activas de empleo para la reincorporación de desempleados al mercado de trabajo y cuentan con la cofinanciación del Fondo Social Europeo.
Podéis contactar con Convega a través de su página web.
