El secretario general de Empleo y Migraciones de la Federación Agroalimentaria de CCOO en Murcia, Manuel Pérez, ha informado en rueda de prensa de que la denuncia contra la ETT Iman Temporing se produce por «infracción de las normas laborales».
Pérez ha recordado que el artículo 14 de la Constitución Española establece que todas las personas son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer ninguna circunstancia personal o social, entre ellas la nacionalidad.
Por su parte el secretario comarcal del sindicato, Enrique González, ha estimado que la oferta «puede alentar brotes racistas o xenófobos».
Un trabajador que recibió la octavilla con la oferta de empleo por la calle puso el caso en conocimiento del sindicato.
El anuncio indica que «empresa de ámbito nacional precisa cortadores de lechuga» y añade que «se requiere experiencia en el sector, nacionalidad latina, personas responsables y ganas de trabajar», a cambio de lo que se ofrece, en jornada de mañana y tarde, «trabajo estable y duradero».
Pérez ha expuesto que junto al posible componente xenófobo de la oferta de empleo, la empresa no hace mención al convenio colectivo de aplicación en el sector, que establece el salario, la jornada y el resto de las condiciones laborales.
Para el responsable del área de Migraciones de CCOO la exigencia del origen sudamericano puede estar vinculado a que estos trabajadores tengan mayor desconocimiento y desinformación sobre la legislación laboral española.
Esta circunstancia, ha añadido, «los hace más vulnerables y fáciles de explotar» por parte de las ETT, que ha calificado «con algunas excepciones» como «una selva» en el ámbito laboral de la Región de Murcia por su poca escrupulosidad en las condiciones laborales para la contratación de trabajadores, sobre todo extranjeros.
