Esta es la principal conclusión del citado trabajo, tras haber analizado las principales condiciones de las entidades más conocidas para un caso supuesto: un préstamo de 3.000 euros a pagar en 48 meses.
La crisis económica y las dificultades para acceder a financiación personal, favorecen, según la CEACCU, la proliferación de entidades que ofrecen dinero «rápido» y «fácil», algunas de las cuales incluso sin necesidad de acreditar que se cuenta con ingresos habituales o con la suficiente solvencia financiera.
Las condiciones no están visibles, se destacan las «cómodas cuotas» a pagar, pero no se indica con claridad el coste total del préstamo. La CEACCU recomienda fijarse en el principal dato, la cantidad total que se terminará pagando, y compararla con la que hemos solicitado. «Sorprenderá saber cuánto devolvemos de más», afirma el estudio.
En cuanto a las comisiones de apertura y cancelación, éstas existen tanto en prestamos tradicionales como en los rápidos, aunque «en estos últimos la información es poco transparente y, en ocasiones, se oculta», y señala que, en algunos casos, las comisiones de apertura pueden alcanzar hasta un 10%.
Los principales inconvenientes de estos préstamos son su elevado coste, la información poco transparente que ofrecen y la facilidad con que se logran, lo que, en opinión de la CEACCU, invita a reflexionar sobre su conveniencia: «Son una solución a corto plazo, pero incrementa el sobreendeudamiento».
El estudio señala que la falta de información sobre elementos esenciales de la oferta, como el TAE y los servicios obligatorios a contratar, supondría un incumplimiento de la directiva de crédito al consumo, como señala la UE, por lo que CEACCU remitirá este dossier a las autoridades de consumo para su evaluación y posibles sanciones.