El centro de formación y preparación de oposiciones MasterD, tras más de dos décadas de experiencia ayudando a aspirantes al funcionariado, explica las cuatro claves en las que se debe basar la preparación de toda oposición que se desee superar con éxito.
Decisión: El trayecto, desde que comenzamos a preparar una oposición hasta que nos presentamos a las pruebas, es largo y nada sencillo. Se trata de un camino que va a suponer un gran sacrificio a nivel personal. Hay que plantearlo a largo plazo y debemos ser realistas considerando qué oposición es la que más se ajusta a nuestros valores y a nuestra formación. La meta de un opositor es conseguir un puesto estable y un sueldo garantizado para toda la vida, y si de verdad se quiere conseguir, es muy importante que el aspirante se conciencie del alto grado de compromiso e implicación que conlleva la preparación de una oposición.
Motivación: Cuando hayamos tomado ya la decisión de qué oposición queremos preparar, se deberá empezar a gestionar el tiempo de estudio. Tanto la constancia como la persistencia tendrán que ser nuestras compañeras de viaje, ya que son esenciales. Estamos tratando de conseguir un empleo para toda la vida. Esto es algo que no debemos olvidar, puesto que nos ayudará a mantenernos motivados. Además, hay otros motivos, como el salario, la satisfacción personal o la estabilidad, entre otros, que serán los que nos harán seguir luchando día tras días por nuestro objetivo: acceder al sector público.
Técnica: La metodología será la base de nuestro éxito. Esta afecta al estudio pero también a otro tipo de pruebas. La forma de estudiar una determinada prueba dependerá de la naturaleza de esta. Es decir, según qué tipo de examen sea, adaptaremos nuestro estudio a ella. Si la prueba consiste en desarrollar un tema, la manera de estudiar deberá basarse en una memoria del recuerdo. Si se trata de un examen tipo test, deberá intervenir la memoria del reconocimiento. Lo que es común a todas las pruebas es la metodología, que deberá caracterizarse por el uso y elaboración de esquemas que nos ayuden a la comprensión, la memoria fotográfica o visual y el sentido crítico, entre otros. Y todo ello se trabaja con los alumnos en los centros MasterD.
Simulacros: Ensayar con exámenes similares a los oficiales por medio de simulacros ayuda realmente a los aspirantes al funcionariado. El fin es que los alumnos se acostumbren a enfrentarse a ese tipo de pruebas y les pierdan “ese miedo” que puede llevarnos a que nos quedemos bloqueados el día del examen. Está demostrado que las oposiciones se afrontan mejor tras haber realizado varios de estos simulacros. En MasterD también se incluyen simulacros de pruebas físicas, donde los opositores a fuerzas y cuerpos de seguridad ponen a prueba sus aptitudes y condiciones físicas, como lo harán el día de la prueba real.
