Así lo ha explicado Cifuentes tras entregar las llaves a los inquilinos de una promoción de vivienda pública en Carabanchel Alto, donde ha especificado que la idea de crear esta tarifa de 10 euros -que entrará en vigor a mediados de noviembre- es no sólo facilitar el transporte de los parados, sino también impulsar el programa de activación del empleo para ayudarles a mantenerse activos buscando trabajo.
Un plan, subvencionado por el Estado, que muchos ciudadanos no conocen, según Cifuentes, por lo que la nueva tarifa de transportes podría contribuir a darlo a conocer, ayudando así a que sus usuarios puedan encontrar trabajo antes.
Por eso ha señalado que el abono para parados no tendrá “limitación” de personas que puedan solicitarlo, ya que se dará a todos aquellos inscritos en este programa, que tiene una duración temporal -de seis meses-.

No se trata, por tanto, de subvencionar el transporte a todas las personas que están en paro, algo que “sería completamente inviable” para cualquier administración.
Y ha recordado, a este respecto, que los billetes de transporte público de Madrid ya están subvencionados en un 50 % y que, para ello, el Consorcio de Transportes aportó 999 millones el año pasado, de los cuales más de 700 fueron aportación directa de la Comunidad de Madrid.