A lo largo del segundo semestre de 2010, el Consorcio de la Inspección de Trabajo, un órgano mixto entre la Generalitat y el Estado, efectuará, según el plan, inspecciones en más de 12.300 centros de trabajo.
Estas inspecciones se centrarán, durante el verano, en sectores con un mayor empleo estacional, como la hostelería, la agricultura o el ocio, según un comunicado del Departamento de Trabajo.
Igualmente, la Inspección de Trabajo ha creado un buzón de colaboración donde se podrán denunciar, de forma anónima, casos de economía irregular o de trabajo no declarado.
«Todos estamos haciendo esfuerzos para mantener el Estado del Bienestar y éste se mantiene mediante las aportaciones de las empresas y de los trabajadores», ha declarado Serna.
El Departamento de Trabajo ha anunciado también que pondrá énfasis en el control sobre la contratación de jóvenes con inspecciones en más de 2.100 centros, así como en el cumplimiento del 2 por ciento de los puestos de trabajo que las empresas deben reservar a personas discapacitadas.
El Govern también prevé supervisar el sector de la construcción y ampliar las medidas de control para que se cumpla la normativa sobre seguridad laboral.
