Repsol invertirá más de 60 millones de euros en 2015 en su refinería del Valle de Escombreras (Cartagena), en su mayoría destinados a reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de la factoría, mejorar su seguridad contra incendios y realizar labores de inspección y mantenimiento de los equipos.
De ese presupuesto, 20 millones los destinará a la inspección en el área de Conversión, una de las más grandes de la refinería. Está previsto que se realice en octubre y afectará a la mitad de las instalaciones.
Durante ese periodo, Repsol contratará en los picos más altos hasta 1.700 trabajadores adicionales a los de su plantilla, compuesta por 850 empleados de personal propio, y en torno a 800 más de personal contratista, que varía en función de las inversiones en cada periodo.
Estas contrataciones temporales se llevarán a cabo a través de varias empresas (entre 30 y 50 empresas), en su mayoría locales. Y, tras esta inspección, en 2016 acometerá otra para revisar la otra mitad de estas instalaciones. Asimismo, tiene previsto paradas periódicas cada año para revisar diversas divisiones de la planta, y en cada una de ellas será necesaria la contratación de personal de apoyo.
En cuanto a ampliaciones de la plantilla habitual, desde Repsol han recordado que el número de trabajadores ya se vio incrementado con las nuevas instalaciones, que triplicaron la producción anterior, por lo que ahora se mantiene un nivel de empleo estable que no está previsto aumentar este año.
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