Siempre resulta curioso ver como las cifras de paro del Servicio Público de Empleo Estatal (antiguo INEM) y las de la Encuesta de Población Activa (EPA) arrojan datos diferentes. Entre ambas mediciones existe una diferencia de casi medio millón de personas. ¿Por qué?
La principal causa es que utilizan sistemas de medición diferentes. La EPA mide la tasa de paro mediante un sondeo que se realiza en entrevistas telefónicas. Para la EPA, un parado es aquella persona que quiere trabajar y busca activamente empleo.
Por el contrario, el SPEE cuenta a los parados teniendo en cuenta las personas que se inscriben como tal en las oficinas de empleo, pero excluye a ciertos colectivos que hacen que las cifras dadas no sean del todo ajustadas a la realidad.
Así, el Servicio Público de Empleo no cuenta como parados a los demandantes que solicitan un empleo para un período inferior a tres meses; las personas que buscan un trabajo con una jornada inferior a veinte horas semanales; las que cursan estudios de enseñanza oficial reglada –siempre que sean menores de 25 años o que, superando esta edad, sean demandantes de primer empleo–; las personas que asisten a cursos de formación profesional ocupacional, cuando sus horas lectivas superen veinte a la semana, tengan un beca y sean demandantes de primer empleo; los beneficiarios de prestaciones por desempleo que realizan un trabajo a tiempo parcial; los demandantes que perciben el subsidio agrario; las personas que rechazan acciones de inserción laboral adecuadas a sus características; los ciudadanos sin disponibilidad inmediata para incorporarse a un puesto de trabajo o que solicitan un empleo en el extranjero; los demandantes de servicios previos al empleo –es decir, de quienes necesitan realizar un curso para trabajar en otro sector, una modalidad introducida en febrero del año pasado, coincidiendo con el cierre industrial de Delphi, en Cádiz–; y los trabajadores en situación de suspensión o reducción de jornada como consecuencia de un Expediente de Regulación de Empleo, según la información de Expansión y Empleo.
Así, todas esas personas que el INEM no cuenta como parados, ascienden hoy en día a 714.478 personas, que, sumadas a las cifra oficial de 3.709.447 parados, nos da un dato real de 4.423.925 desempleados, algo que supera incluso la estimación de la EPA.
Esperaremos, en cualquier caso, a conocer las cifras oficiales de paro de Octubre que se darán a conocer mañana. Pero ya sabéis, a lo que nos cuenten, sumarle un pico de unas 715.000 personas.