Según ha explicado el consejero de Presidencia, Roberto Bermúdez de Castro, el objetivo de este plan es prestar apoyo formativo a la incorporación de nuevas tecnologías o innovación en las empresas aragonesas y asegurar la actualización del nivel de competencia de los trabajadores desempleados, activos y autónomos.
El convenio fija la realización de un número mínimo de 400 acciones de orientación con personas sordas, la celebración de un mínimo de 75 contrataciones, la derivación al INAEM de ofertas de empleo que la entidad obtenga en su labor de prospección, así como la colaboración en las «Jornadas Técnicas de Orientación Profesional», que anualmente organiza el INAEM con la participación de intérpretes de lengua de signos.