Serán 53 cursos, de mejor contenido y mayor duración que los ofertados años atrás, e irán destinados a 800 parados, los cuales tienen una alta probabilidad de encontrar trabajo al finalizar los mismos. La subvención con la que cuenta este paquete formativo es de 1.8 millones de euros.
La gran novedad de este paquete formativo es que, más allá de ofrecer cursos que quizás después no tengan salida profesional, se ha ajustado la formación a las demandas de empleo de las empresas. Así, los cursos girarán en torno a los sectores que en la isla siguen generando empleo: educación infantil, energías renovables, hostelería y nuevas tecnologías.
No sólo los parados podrán optar a estos cursos, ya que 2 plazas de cada 10 se han reservado a personas que quieran reorientar su carrera o progresar en sus empresas, sin necesidad de que estén en el paro.