Según el IDES, el 29,2 por ciento de los parados tiene mala percepción de su salud frente a las personas ocupadas –18,9%–. En el caso de los hombres en paro, un 15,6 por ciento manifiesta sentirse deprimido respecto al 6,5 por ciento de los ocupados. Más mujeres paradas se sienten tan deprimidas como los hombres, con un 17 por ciento, respecto al 12,8 por ciento de las ocupadas que afirman estarlo.
Según ha explicado el director del estudio, Josep Cercós, el creciente desempleo está afectando a la salud tanto de los parados como de sus familias, sobre todo en el ámbito psicológico, desarrollando cuadros de ansiedad o depresivos.
El estudio destaca que la salud de las mujeres paradas es peor que la de los hombres en la misma situación laboral, lo que indica una mayor vulnerabilidad femenina respecto a estos trastornos.
Cercós ha aplaudido medidas como la garantía de la vivienda, la mejora de la red de relación social y el subsidio de desempleo ya que «han demostrado eficacia» en la mejora del estado de salud de las personas.
El IDES es una fundación privada sin ánimo de lucro creada en 1998 por el Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Cataluña y por el Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña, con el objetivo de «contribuir a crear una nueva cultura de la seguridad» en Cataluña.