Esta OPE es fruto de las negociaciones entre la Administración Pública y los sindicatos, tras la firma el pasado mes de diciembre del preacuerdo de condiciones de trabajo del personal funcionario de con el apoyo de los sindicatos ELA, CCOO y UGT, en el que se recogía el compromiso para convocar ofertas de empleo público durante los próximos tres años.
Así, la oposición ofrece 419 plazas de los cuerpos de subalterno, auxiliar administrativo y administrativo. El personal de estos cuerpos representa aproximadamente el 50 por ciento de toda la plantilla, y ya han transcurrido 10 años desde la última convocatoria a estos cuerpos.
Estos procesos no van suponer un aumento del número de personas al servicio de la Administración. Su objetivo es reducir la precariedad en el empleo del personal sin suponer, por tanto, un aumento del gasto de personal.
Los procesos diseñados buscan el equilibrio que permita garantizar, por un lado, la libre concurrencia de la ciudadanía y, por otro, la estabilidad del personal.
Estas convocatorias son procesos abiertos, diseñados para que toda la ciudadanía pueda acceder al empleo público, y basados en los principios de igualdad, mérito y capacidad.
Tienen dos fases: oposición y concurso. En la fase oposición se van a realizar dos tipos de examen, ya que es imprescindible evaluar no sólo conocimientos (examen teórico), sino también destrezas (examen práctico).
En la fase concurso se valoran como méritos la formación y la experiencia, el mérito más relevante en el proceso selectivo. La valoración del euskera se ajusta a las previsiones contenidas en la normativa, Decreto de normalización lingüística de (86/1997), y de conformidad con el acuerdo alcanzado con la mayoría sindical en la mesa general de negociación.
