Chamizo ya tiene en su poder la solicitud que le enviaron estos desempleados para que «medie» en el conflicto que mantienen con la entidad local por los supuestos favoritismos en la gestión de la bolsa de trabajo y, más concretamente, con el alcalde de Maracena, Noel López (PSOE), que ha negado estas acusaciones y ha avanzado que no cederá a las reivindicaciones de esta personas, que han perdido su empleo en el sector de la construcción.
Así las cosas, Chamizo ha comenzado a gestionar su solicitud y ya ha solicitado información al Ayuntamiento de la localidad sobre los motivos de este desencuentro y los criterios usados para adjudicar los trabajos disponibles en el municipio.
Lo cierto es que el Defensor «no se ha posicionado» hacia ninguna de las partes y sólo está siguiendo el protocolo de actuación habitual, por el cual se le pide información a la parte contra la que se dirige la queja y, una vez recibida, se traslada a los afectados.
En su carta, los desempleados piden a Chamizo que la bolsa de empleo sea «baremada», de modo que se «rompa el círculo vicioso del enchufismo y amiguismo, que si bien siempre es criticable y detestable, en tiempos de crisis es una práctica que el pueblo no va a permitir».
Los parados, que desarrollan su protesta encerrados en la parroquia del pueblo, recuerdan además al Defensor que son «cinco padres de familia cuya realidad refleja la del millón y medio de personas que no perciben ningún sueldo, que se están quedando sin sus casas y que sobreviven de la caridad o de las redes familiares».
Ya han recogido más de un millar de firmas de apoyo entre los ciudadanos y han asegurado que no abandonarán su protesta hasta que les den un empleo y les garanticen que la bolsa de trabajo se repartirá de un modo justo.
Por ello, han pedido «encarecidamente» a Chamizo que interceda en el conflicto y les «asesore» en lo que pueden hacer para que «no se repita este atropello a la verdad y a la integridad del pueblo», después de que el Ayuntamiento haya defendido su buena gestión.